LA CLEPTOMANÍA

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La cleptomanía es aquel trastorno que se caracteriza porque las personas no se pueden contener a la hora de robar. Generalmente son cosas que no se necesitan y suelen tener poco valor, aunque pueden darse casos cuya economía del objeto es elevada. Siguiendo los criterios diagnósticos, se encuentra dentro de los trastornos del control de los impulsos, ya que existe una dificultad recurrente para controlarse a no robar, se tiene la sensación de tensión antes de cometer el robo, así como bienestar tras realizarlo. Sin embargo, posteriormente aparecen sentimientos de culpa y vergüenza por la realización de dicho robo, lo que conlleva a largo plazo a sentimientos depresivos, que junto con los sentimientos de ansiedad que generan los impulsos por robar, crean auténticos problemas en las personas que lo sufren.

Existen diferentes teorías sobre el origen de este trastorno, aunque el más validado hace referencia al componente cerebral de la cleptomanía. Se ha corroborado en estos pacientes una alteración en el funcionamiento de la Serotonina, donde en estos casos se observa una disminución de la misma. Este neurotransmisor está relacionado con el estado de ánimo y las emociones, y se sabe que los niveles bajos de serotonina (como ocurre con la cleptomanía) producen descontrol de las conductas impulsivas. Igualmente, existe un aumento de la Dopamina cuando la persona está cometiendo el acto de robar.

Es por estos motivos por los que los tratamientos para la cleptomanía son los mismos que para las adicciones (consumo de alcohol, cocaína, marihuana, ludopatía…), ya que en ambos casos la alteración química cerebral es similar y ocurre con los mismos neurotransmisores. Los adictos, igualmente, presentan elevados niveles de dopamina al consumir, con alteraciones en la serotonina, que les produce cambios emocionales. En ambos trastornos, las alteraciones en los estados de ánimo llevan a las personas a recurrir en las mismas conductas como medio para controlar los estados depresivos o ansiosos.

El tratamiento cognitivo – conductual, por tanto, es el valorado como el más fiable y con mayor validez tanto para la cleptomanía, como para las adicciones. Junto con la ayuda farmacológica, los pacientes pueden aprender a controlar sus conductas con el fin de evitar males mayores tanto para ellos mismos como para los de su alrededor, ya que los familiares, en ambos casos, sufren también las consecuencias de sus conductas (daños a la salud, problemas legales, problemas en las relaciones, con las amistades, la familia o a nivel laboral, etc).

El Centro de Tratamiento Valle del Tiétar pone a su disposición un tratamiento personalizado e individualizado dividido en tres fases (desintoxicación, deshabituación y prevención) que les permitirá conocer en profundidad su enfermedad, así como los medios para evitar nuevamente caer en las conductas desajustadas.

Fuentes:

Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales DSM-V

www.cleptomania.org